Hace tiempo que Catalina me pregunta: ¿Cuándo vas a escribir sobre mi en tu blog, mamá? Ahora, por esas cosas que pasan...es ella misma quien me regala una historia que paso a contar.
El jueves de la semana pasada, el papá de Cata preparó duraznos en almíbar con crema y dulce de leche y se los hizo probar: Son riquísimos, mamá. Mientras comían los duraznos, su papá puso el vinilo de Durazno sangrando. Justamente. Un disco de el flaco, me aclaró Cata por las dudas. ¿Te gustó?, le pregunté intrigada. No me gustó...¡me encantó! Casi tanto como los duraznos en almíbar con crema y dulce de leche.
A.B